La bolsa de valores está presente en el número uno de los instrumentos de inversión en todo el mundo. Es, además, noticia en informativos y periódicos y de su marcha depende buena parte de la economía. Sin embargo, todavía son muchos los que desconocen qué es la bolsa y, sobre todo, cómo se puede ganar dinero con ella. Por eso, Ecorenta te ofrece este breve tutorial sobre las diferentes opciones que tienes para invertir en bolsa.
Primero, explicar brevemente que la bolsa es una organización que permite comerciar con las acciones de compañías -empresas- que han acudido a esa bolsa de valores. Las empresas dividen su composición en una serie de acciones que, cuando salen a bolsa, pueden ser adquiridas o vendidas por inversores particulares que ostentarán así un porcentaje de la empresa en función del número de acciones adquiridas. El volumen de la oferta y la demanda de las acciones de cada compañía, determinado a su vez por diferentes factores como la marcha económica o las perspectivas, marca el precio de las acciones que va fluctuando en tiempo real.
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Invertir en fondos de inversión asociados a bolsa
Es, sin duda, la forma más sencilla de invertir en bolsa para aquellos que no son expertos en bolsa e iniciarse así en la inversión en ella. Existen multitud de fondos de inversión que dividen su composición en la inversión de una cartera de acciones diversificada. Estas carteras están operadas por expertos que compran y venden las acciones para maximizar así la rentabilidad del fondo.
Cada fondo de inversión explica dónde invierte y cómo compone su mix de inversión. Por ejemplo, empresas tecnológicas de Estados Unidos, compañías del Ibex 35 en España, corporaciones innovadoras en mercados emergentes, etc. En función de la composición y lo agresiva que sean las inversiones, a cada fondo se le suele asignar un nivel de riesgo, para que el inversor pueda escoger el más acorde con sus necesidades.
Cada fondo de inversión suele cobrar una comisión por la gestión del dinero depositado y pueden además cobrar otra por las operaciones de compra o venta de participaciones en el fondo.
Comprar y vender acciones
Es la forma tradicional de operar en bolsa de toda la vida. Compramos un determinado número de acciones de la empresa que queremos y esperamos el tiempo que consideremos necesario para venderlas, con la esperanza que durante todo ese tiempo la compañía gane en valor y las acciones suban.
Se trata de una operación con un riesgo inherente que depende no sólo de la marcha de la compañía en cuestión, sino de otros muchos factores como la evolución del sector al que pertenece en particular o de la misma marcha de la economía del país o situación macroeconómica en general.
Cuando adquirimos acciones estas pasan a formar parte de nuestro patrimonio, aunque no se tributa fiscalmente por ellas hasta que optamos por venderlas. En ese caso se resta al valor de venta el de la compra y, si hemos ganado dinero, se habla de plusvalías. Si lo perdemos, minusvalías. Los impuestos que se abonan son un porcentaje de esas plusvalías.
Operaciones sobre mercados en divisas extranjeras
Es una forma de invertir muy similar a la anterior, con la diferencia que la empresa está cotizando en una bolsa que opera en una divisa que no es la nuestra. A este tipo de inversiones se le suma una variable más al riesgo que la evolución de la moneda en la que hemos decidido invertir con respecto a la nuestra.
Si, por ejemplo, vivimos en España y compramos acciones en la bolsa de Nueva York no sólo podremos ganar dinero si esas acciones suben, también si lo hace el dólar frente al euro. Es por tanto muy importante consultar la evolución y las perspectivas de una divisa cuando vamos a invertir en una compañía cotizada en una bolsa con moneda extranjera.
Dividendos
Se trata de una estrategia de inversión a más largo plazo. Consiste en comprar acciones de empresas que reparten dividendos de manera habitual. Los dividendos se reparten generalmente de manera trimestral tras la presentación de resultados económicos y consisten en un precio fijo por acción que se abona a los propietarios de dichas acciones.
Es una forma de participar en los beneficios de una empresa y una forma de ganar dinero en bolsa complementaria a las dos anteriores. Conviene recalcar que el pago de dividendos y su importe es una decisión que toma cada empresa de manera particular y cada momento. Existen empresas que ganan mucho dinero y no reparten dividendos, mientras que otras sí lo hacen.
Si esperas conseguir ganancias por dividendos necesitas consultar el histórico de cada compañía en la quieres invertir y consultar su política de dividendos así como el histórico en el pago de los mismos.
Operar en corto
Hablamos ahora de otra forma de ganar dinero en bolsa mucho más compleja y a la vez menos explotada. Se trata de las operaciones en corto o venta en corto, también conocidas como inversiones a la baja.
Si normalmente invertimos en una empresa apostando a que sus acciones van a revalorizarse, en las operaciones en corto lo hacemos esperando lo contrario, es decir, apostando por la caída de un valor.
Se trata de una forma de operar de alto riesgo, con una ventana de inversión mucho más corta y que sólo debe realizarse si estás familiarizado con este tipo de operaciones. En la práctica, el proceso consiste en «coger prestadas» acciones que uno no tiene a otros accionistas con el compromiso de devolvérselas en una fecha concreta.
Esas acciones prestadas se venden en el mercado con la esperanza de que la acción vaya a bajar. Cuando bajan, se vuelven a comprar a un precio menor y se le devuelven al prestamista, habiendo obtenido así una ganancia. Por supuesto, si las acciones no bajan o no lo hacen lo suficiente el compromiso de devolución de las acciones se mantiene, por lo que en ese caso se tendrían que comprar al precio de mercado y se perdería dinero con la operación.
