El 29 de enero de 2007 la multinacional alemana Media Markt introdujo en España el mal denominado «Día sin IVA». El cliente tenía acceso a toda la oferta habitual de la tienda, sin pagar el, por entonces, 16% del Impuesto del Valor Añadido.
Este «Día sin IVA» fue toda una pequeña revolución que disparó las ventas y la popularidad de la cadena de electrónica y electrodomésticos.
Era una táctica comercial un tanto discutible, porque utilizaba un reclamo falso. En realidad lo que hacía la tienda era aplicar un descuento equivalente al 16% de IVA, ya que el impuesto se seguía pagando sobre la base imponible descontada. Sin embargo, en medio de la conversación sobre la presión fiscal, ese «día sin IVA» parecía un doble acierto: no sólo te ahorrabas el 16%, además dabas la impresión de meterle un gol a Hacienda.
Los tiempos han cambiado. El IVA pasó del 16% al 18%, y del 18% al 21%. Y el Día sin IVA se multiplicó con una facilidad mayor que los panes y los peces. Los rivales como El Corte Inglés y similares empezaron a aplicarlo tal cual y Media Markt empezó a multiplicar sus días sin IVA hasta el punto de llegar a realizar prácticamente uno al mes, incluso más si es online.
Raro es ya el fin de semana que uno no pueda encontrar en una tienda u otra un «día sin IVA».
La pérdida de eficacia del Día sin IVA
Por supuesto, ante tal proliferación el Día sin IVA ha dejado de tener interés. Primero por el asterisco que incorpora la lista de productos excluídos de la promoción que cada vez es mayor. Y, cuando el producto es nuevo o no queremos venderlo con descuento, las tiendas ya han aprendido a sacarlo del stock con la antelación prudente.
Eso sin contar los sospechosos cambios de precio que hacen elevar el precio de un producto días antes de un Día sin IVA. Al final el consumir ha quedado inmunizado al día sin IVA como lo ha acabado estando a otro tipo de promociones similares.
El verdadero Día sin IVA existe
Cabría preguntarse por qué el Estado continúa permitiendo este tipo de publicidad engañosa. Es de suponer que dada la popularidad que ha ido adquiriendo la campaña sin que se hiciese nada, es ya tarde para tomar cualquier tipo de medida.
Lo cierto es que el Día sin IVA sí es una idea que exista en otros países y que podría importarse a España. En Colombia, por ejemplo, el Ministerio de Economía organiza tres días al año sin IVA en los que las tiendas no aplican este impuesto a determinados artículos dentro de unos límites fijados.
La idea es favorecer el consumo y ayudar a los comercios a mejorar sus ventas sin tener que cargar el descuento sobre sus márgenes.